El pontífice también respondió cuestionamientos sobre el aborto, los derechos LGBT y la pornografía, entre otros temas como los abusos sexuales dentro de Institución Católica y las palabras del Papa ha tomado por sorpresa a muchos de sus fieles, ya que el debate está en que los sacerdotes dicen que ellos se mantienen santos y no tienen derecho al sexo.
El papa fue duramente criticado por sus repuestas
En un documental producido por Disney el papa Francisco puso de manifiesto la virtudes del sexo y lo calificó como uno de los regalos «más bellos» que Dios le entregó a la humanidad y en la cinta ‘Amén: el papa responde que su encuentro el año pasado con 10 jóvenes en Roma estas preguntas fueron normales en todo momento, donde Francisco respondió preguntas sobre una variedad de temas no siempre discutidos abiertamente por los clérigos, como los derechos LGBT, el aborto, la pornografía, el sexo y los abusos sexuales de menores dentro de la Institución Católica.
«El sexo es una de las cosas más bellas que Dios ha dado a las personas. Expresarse sexualmente es una riqueza. Cualquier cosa que desvirtúe la expresión sexual real te disminuye y agota esta riqueza. La masturbación y la pornografía no son malas. Debemos ver con buenos ojos y ser misericordiosos con las mujeres que han interrumpido su embarazo y sea aunque injustificable. Todos somos hijos de Dios y así debemos ver la Comunidad LGBT. Llevemos el diálogo abierto y sincero las mujeres que abortan y las personas LGBT»
Papa Francisco, octavo soberano de la Ciudad del Vaticano
El Vaticano califico la entrevista como abierta y sincera
Asimismo tras ser cuestionado sobre si sabía lo que una persona no binaria es, el papa asintió y aseguró que «todas las personas son hijos de Dios», motivo por el cual las personas LGBT no deberían ser rechazados por la Iglesia Católica ni los fieles y en cuanto al aborto, Francisco dijo ver con buenos ojos que los sacerdotes y los fieles católicos sean «misericordiosos» con las mujeres que han interrumpido un embarazo, pero dijo que la práctica es injustificable. Por su parte el Vaticano calificó la experiencia como un «diálogo abierto y sincero». El documental fue rodado en junio de 2022 en un edificio del barrio de Pigneto de la capital italiana. En él participaron 10 jóvenes de entre 20 y 25 años procedentes de España, Senegal, Argentina, Estados Unidos, Perú y Colombia.
