El papa Francisco advirtió a los burócratas del Vaticano que tengan cuidado con el mal que acecha entre ellos, que describió como “demonios educados” que asedian a la gente que vive la fe católica de forma rígida y presuntuosa aprovechando su mensaje anual de navidad y hablo de que muchos de ellos engañan a los habitantes.
El discurso navideño del papa se dio en una conferencia en vivo
Francisco aprovechó su mensaje anual de Navidad a la curia romana para volver a advertir a los cardenales, obispos y sacerdotes que trabajan en la Santa Sede que en ningún caso están más allá de todo reproche y que de hecho son vulnerables a la maldad en su máxima expresión, diciéndoles que al vivir en el corazón de la Iglesia Católica podrían caer en la tentación de hacer cosas malas o pensar en ellas, sin embargo los residentes en el Vaticano corren más peligro, porque están cercados por demonios educados.
“No existe sólo la violencia de las armas, existe la violencia verbal, la violencia psicológica, la violencia del abuso de poder, la violencia escondida de las habladurías. No aprovechen su posición y papel para mortificar al otro. Podríamos caer en la tentación de pensar que estamos seguros, que somos mejores que ya no nos tenemos que convertir. Muchos demonios educados que entran con educación sin que uno se de cuenta”
Papa Francisco, octavo soberano de la Ciudad del Vaticano
La maldad dentro de nuestra institución es grande indicó Francisco
Hace años que Francisco utiliza su mensaje de Navidad para dar una reprimenda anual a los burócratas del Vaticano, a los que guía en un examen de conciencia típicamente jesuita para ayudarles en el arrepentimiento antes de Navidad, él Papa también pareció dirigirse de forma más general a tradicionalistas y ultraconservadores, que se han convertido en sus mayores críticos por los problemas de abusos sexuales de Iglesia Católica y al mismo tiempo hablo de la educación que reciben muchos cardenales en las escuelas de la Iglesia Católica.
Desde la Agencia Noticiosa creemos que él Papa Francisco tiene mucha razón con sus palabras, sin embargo la realidad de la Iglesia Católica es muy oscura y muchos de estos demonios educados todavía no han sido juzgados por los casos de abusos sexuales, casos de corrupción y entre otros que el mismo Vaticano esconde en sus paredes y más que un discurso de Navidad la misma la Iglesia Católica debería mejorar estas cosas y así comenzar a limpiar la oscuridad de sus paredes.