El Secretario de Defensa de Estados Unidos, en un comunicado de prensa oficial, recordaba que hace 2 años iniciaron las protestas en Nicaragua y señala que el régimen de Ortega sigue manteniendo presos políticos y que ha cerrado el dialogo, demostrando que nunca tuvo intención real de una transición democrática.
“Hacemos un llamado al presidente Ortega y a la vicepresidenta Murillo para que inicien inmediatamente una transición democrática, incluida la restauración de las garantías de derechos humanos y elecciones libres y justas, para proporcionar una Nicaragua sana, próspera y libre.”
Mike Pompeo, Secretario de Estado de los Estados Unidos
Ante estas declaraciones surge la duda, sobre que papel podría jugar Costa Rica durante una eventual transición forzosa por parte de Estados Unidos en el vecino país del norte.
Al ser un país sin ejercito, pensaríamos que deberíamos mantenernos al margen, sin embargo al ser un aliado de Estados Unidos, probablemente terminaríamos por aplicar políticas que de una forma u otra conduzcan a dicha transición, aunque se diga que no, podríamos hacer una alusión a Colombia y Venezuela, donde en Colombia niegan que estén participando, mientras Venezuela vive señalando conspiraciones del país vecino en favor de las políticas Norte Americanas.
¿La crisis del COVID-19 y los números maquillados podrían ser el detonante?
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos recientemente ha levantado la voz indicando que el mal manejo que se esta realizando en Nicaragua, podría conducir a un salto en las muertes desproporcionadas y ha vuelto la mirada del mundo, incluido Estados Unidos sobre Nicaragua.
A la vez hay que recordar que los países como Venezuela y Cuba, han sido objeto de bloqueos por parte de Estados Unidos y Nicaragua también ha sido sancionada, por lo que es claro que el panorama, podría volverse mucho más real si se confirma la segunda legislatura del presidente Donald Trump.
¡Costa Rica es un pueblo de paz!
Lo cierto es que Costa Rica no disparara una bala por la democracia en Nicaragua, o al menos eso pensaría, pero si será una nación determinante en el ajedrez que podría detonar que pronto el régimen de Daniel Ortega caía y el mundo conozca una Nicaragua libre.
Lo ideal sería que esto este proceso como invita el Departamento de Estado de EE.UU., sea pacifico, sin embargo el señalamiento de cientos de muertos durante las protestas ha continuado el derramamiento de sangre en la nación norteña y esa sangre, ha dejado heridas, que solamente la democracia podrá sanar.
Es decisión de Costa Rica y debemos comenzar a pensar…
Ciertamente es tiempo de que a nivel país, comencemos a pensar en cuál será nuestro bando y que tan comprometidos estamos como país independiente a ser parte de la historia de libertad de Nicaragua o si por el contrario, le diremos a nuestro principal aliado comercial, Estados Unidos que pensamos mantenernos al margen.